Si me preguntas si es posible organizar una boda bonita en tres meses… Sí, lo es, y aquí tienes las fotos de la boda de Vero y Borja para demostrarlo. Una mudanza por trabajo de Barcelona a Nueva York hizo que se acelerase el proceso en la organización de su boda, y gracias las wedding planners de Essence Menorca y el resto de proveedores, consiguieron celebrar la boda que querían rodeados de naturaleza.

Toda sucedió en una de mis fincas favoritas para casarse en Menorca: Santa Teresa, ubicada en la costa norte y cerca del faro de Cavalleria. Ambos se prepararon ahí y, una vez listos, hicieron un first look, uno de mis momentos favoritos como fotógrafa de bodas.

Un first look es el momento en el que la pareja se ve por primera vez antes de la ceremonia, este momento suele realizarse a solas -además del fotógrafo y el videógrafo para capturar la reacción-. Algunas parejas deciden hacerlo porque les permite tener un momento privado antes de la ceremonia, reducir el estrés y la ansiedad del gran día, y también les da la oportunidad de tomarse fotos juntos antes de que comience la ceremonia oficial. Después de este momento, Vero y Borja salieron juntos hacia su ceremonia civil con vistas al faro y al mar de fondo. Para aprovechar al máximo de los invitados y de la luz de la puesta de sol, decidimos hacer dos mini sesiones de pareja en vez de un reportaje largo, la primera fue justo después de la ceremonia y la segunda cuando la luz dorada ya inundaba la finca por completo.

Los invitados no pararon de bailar ni en el aperitivo ni durante la cena, que fue tipo buffet con Catering Salgar. Sin haber terminado el postre, los invitados volvieron a levantarse a cantar y bailar con los novios con las canciones de Lara Pons.