Catalana y Menorquín, Gisela y Tolo tenían clarísimo que querían una sesión preboda en Barcelona antes de celebrar su boda en Menorca.
Después de cuadrar fechas y comprar mi vuelo, nos encontramos a primera hora de la mañana en la plaza Sant Jaume, en pleno barrio gótico, y empezamos a callejear por esa zona hasta llegar a la basílica de Santa María del Mar. Mi sorpresa fue enorme cuando me dijeron que habían conseguido que nos dejaran subir al tejado de la basílica. Fue uno de esos momentos mágicos en los que agradezco al mundo ser fotógrafa y tener unas parejas tan increíbles.
Después de alucinar con las vistas desde encima de la basílica, fuimos a desayunar y terminamos la sesión en la zona de graffitis de Poblenou.
